En un informe audaz, el banco de inversión Morgan Stanley afirma que China se está posicionando estratégicamente como líder en la carrera por desarrollar robots humanoides avanzados. 
Mientras figuras tecnológicas como Jensen Huang, CEO de NVIDIA, y Elon Musk de Tesla siguen promoviendo los robots humanoides, Morgan Stanley comparte una serie de puntos clave que explican por qué China podría estar adelantada a los EE. UU. en esta carrera tecnológica.
El informe destaca el dominio de China en el mercado de los metales raros, que son esenciales para la fabricación de electrónica y robots. Según Morgan Stanley, China controla el 65% de las reservas mundiales de metales raros y un impresionante 85% del procesamiento de estos materiales. Esto le da al país un poder considerable, lo que fue evidente durante las negociaciones comerciales con EE. UU. bajo la presidencia de Donald Trump. El banco argumenta que la capacidad de China de influir en la producción de los complejos industriales occidentales mediante su control de los metales raros podría otorgarle una ventaja decisiva en la producción de robots.
Además, Morgan Stanley señala los rápidos avances de China en las tecnologías de fabricación. El país ha aprovechado una combinación de transferencia de tecnología de empresas occidentales y sus propias innovaciones. En particular, el banco destaca el concepto de “Destrucción Creativa” – un entorno de competencia interna donde la innovación a menudo lleva al desplazamiento de otros actores. Esta competencia interna está acelerando el desarrollo de la IA y la robótica en China, ya que cada ciudad y provincia invierte en estas tecnologías.
El compromiso de China de integrar tecnologías avanzadas en el Ejército Popular de Liberación (EPL) y abordar sus desafíos demográficos a través de la robótica también está impulsando el crecimiento de este sector. El país ha generado un gran interés público en los robots organizando eventos como maratones, competiciones de boxeo y espectáculos de danza para involucrar a la población.
Uno de los aspectos más significativos en los que China supera a EE. UU. es la educación profesional. El informe señala que en 2023 China tenía 5 millones de estudiantes matriculados en más de 11.000 escuelas técnicas, mientras que en EE. UU. había solo unos 923,000 estudiantes en instituciones similares. Este enfoque en la educación técnica está preparando una fuerza laboral calificada, esencial para el desarrollo y la fabricación de robots.
Además, las ambiciones robóticas de China se ven respaldadas por subsidios gubernamentales, inversiones agresivas en infraestructura y una planificación estratégica a largo plazo. El gobierno chino ofrece incentivos fiscales significativos para la I+D, permitiendo a las empresas deducir hasta el 200% de los gastos de I+D, y está desarrollando activamente la infraestructura necesaria para crear un sector manufacturero de clase mundial. El último factor que favorece a China es su enfoque en la planificación a largo plazo, que el informe compara con el antiguo juego estratégico chino del Go. Morgan Stanley cree que la estrategia de China se basa en la paciencia y maniobras graduales, en contraste con el enfoque estadounidense que a menudo se centra en los resultados a corto plazo.