La polémica por la función de medición de oxígeno en sangre del Apple Watch suma un nuevo capítulo.
La empresa de tecnología médica Masimo ha demandado a la Agencia de Aduanas y Protección Fronteriza de EE.UU., acusándola de permitir en silencio que Apple reactive esta herramienta en sus relojes pese a que el conflicto de patentes sigue abierto.
Según Masimo, la agencia revirtió una decisión previa sin aviso y Apple aprovechó la oportunidad para recuperar la función a través de las actualizaciones iOS 18.6.1 y watchOS 11.6.1. El cambio es que ahora las mediciones ya no se procesan en el reloj, sino en el iPhone vinculado, apareciendo los resultados en la app Salud dentro de la sección Respiratoria. Apple asegura que este ajuste respeta los nuevos términos aprobados por Aduanas.
El problema comenzó en 2023, cuando la Comisión de Comercio Internacional de EE.UU. falló a favor de Masimo e impidió que Apple vendiera los modelos Series 9, Series 10 y Ultra 2 con la función de oxímetro activa. Para no retirar los relojes de las tiendas, Apple decidió dejar el hardware instalado pero desactivar la opción en las unidades vendidas en el país. De esta forma, pudo seguir comercializando mientras buscaba una solución.
La solución ya está en marcha, pero Masimo sostiene que la agencia excedió su autoridad y debilitó la protección de sus patentes. Ahora pide a un tribunal en Washington que anule la decisión y mantenga el bloqueo.
Para los usuarios del Apple Watch, el regreso del oxímetro es una buena noticia, aunque implique un paso extra con el iPhone. En los tribunales, sin embargo, la batalla legal apenas empieza y el futuro de esta función sigue en el aire.