Después de años de espera, Skate por fin regresa, pero el estreno no ha sido el soñado. Mientras en redes sociales abundan los videos virales de jugadores rodando, cayendo y deslizándose por el mapa a velocidades imposibles, en Steam la realidad es mucho menos festiva.
Con más de 6.300 reseñas publicadas, el juego apenas alcanza una calificación “Mixta”, reflejo de una comunidad dividida entre la diversión absurda y la decepción amarga.
Lo más curioso es que lo que más engancha ahora mismo no es patinar. Los usuarios descubrieron que, al encadenar rodadas, saltos, la clásica pose de estrella y un buen deslizamiento, pueden atravesar la ciudad más rápido que sobre la tabla. En cuestión de horas los clips se viralizaron: avatares sacudiéndose como muñecos de trapo pero corriendo más que cualquier truco real. Un comentario en redes lo resume: “Bro, ¿qué estoy jugando? Esto es más rápido que usar el skate”.
La técnica no tiene ciencia: mantener la dirección, rodar, impulsarse con un salto, abrirse en estrella en el aire, deslizarse al caer y repetir. Un ciclo ridículo que rompe la lógica de la física del juego. Varios veteranos lo comparan con exploits míticos de otros títulos, como el truco de recarga rápida en Metal Gear Solid 3. Está claro que Full Circle no lo diseñó así, pero la comunidad ya lo adoptó como parte de la cultura del juego.
El problema es que la risa no tapa los huecos. Los fans extrañan los modos que hicieron grande a la saga: no hay Hall of Meat, ni Game of Skate, ni carreras o desafíos de historia. Muchos sienten que el alma de Skate se perdió. Un usuario escribió con rabia: “Esto no es la secuela que esperábamos, es una cáscara vacía con una tienda de cosméticos”.
A eso se suman los fallos técnicos. Jugadores reportan crasheos frecuentes en PC, errores que bloquean el tutorial inicial y gráficos que algunos comparan desfavorablemente con la versión de PS3. La personalización de personajes se percibe limitada, y el estilo visual – que prometía ser fresco – luce inacabado y poco inspirado. Además, la obligación de estar siempre conectado y las ruletas de microtransacciones para cosméticos refuerzan la idea de que la monetización está por encima de la experiencia.
Aun así, no todos están enojados. Una parte de la comunidad defiende el juego, recordando que está en acceso anticipado. Para ellos, la base es sólida: la física y los controles son de lo mejor del género hoy en día. Sí, el mapa está vacío y los diálogos son cursis, pero confían en que habrá actualizaciones que lo llenen de contenido. “Ya sabíamos que lo iban a bombardear en reseñas desde que anunciaron el free-to-play”, dijo un fan. “Pero la jugabilidad es increíble y Frostbite va perfecto. Hay que darles tiempo”.
Otros, sin embargo, no perdonan. El hecho de que sea un proyecto de EA genera desconfianza automática. Muchos creen que era evidente que saldría verde y centrado en las microtransacciones. “¿Un juego de EA que parece un juego de EA? Qué sorpresa”, ironizó un usuario. La sensación general es que Skate 4 tenía todo para ser un éxito fácil, pero terminó siendo un título servicio con prioridades dudosas.
Conviene recordar que Skate se anunció en 2020 y pasó años en pruebas cerradas, donde EA ya probaba las microtransacciones cosméticas. Previews de medios como IGN destacaron lo divertido que era explorar el mapa y la sensación de libertad sandbox. Esos elementos están presentes, sí, pero las carencias pesan más. El resultado es un juego que, de momento, provoca más risas cuando tu personaje se estampa contra el suelo que cuando logras un truco perfecto.
1 comentario
Antes a eso le decíamos ‘tech’, igualito al exploit de recarga en MGS3 jajaja