HDR10+ Advanced: 5.000 nits con cabeza, no solo brillo – así quiere Samsung plantar cara a Dolby Vision 2

Samsung ha destapado HDR10+ Advanced, una nueva iteración del HDR pensada para ir más allá del combo HDR10/HDR10+ que domina hoy el mercado. El titular fácil son los picos de 5.000 nits, pero el valor real está en la inteligencia del proceso: mapeo de tonos más fino, control de suavizado de movimiento, perfiles según el género del contenido y adaptación a la luz ambiente. En otras palabras, menos pelea con menús y más consistencia visual en cualquier sala y con cualquier tipo de contenido.

Qué cambia frente a HDR10 y HDR10+

HDR10 usa metadatos estáticos – un único objetivo de brillo para toda la obra – . HDR10+ añadió metadatos dinámicos escena a escena. HDR10+ Advanced sube otro peldaño: eleva el margen para los destellos sin quemar pieles ni arrasar los medios tonos y trata las sombras cercanas al negro con más precisión. Importa recordar que 5.000 nits no significa un foco a la cara todo el tiempo; son picos breves en ventanas pequeñas mientras el nivel medio de imagen se mantiene cómodo.

Formato abierto contra formato propietario

El lanzamiento llega en el mismo ciclo en que apareció Dolby Vision 2, que también presume de tono-mapeo más listo y nuevas herramientas para el movimiento. La diferencia clave es el modelo: Dolby sigue siendo propietario y con licencias, mientras HDR10+ Advanced continúa la senda libre de royalties del ecosistema HDR10. Para fabricantes y plataformas de streaming, eso puede inclinar la balanza de costes y tiempos de adopción.

Modos por género y adiós al “efecto telenovela” donde no toca

Uno de los dolores de cabeza habituales es saltar entre imágenes apagadas y procesados agresivos. HDR10+ Advanced incorpora optimizaciones por género para que una película conserve su textura cinematográfica sin el jabón de la interpolación, mientras deportes o videojuegos se benefician de mayor claridad en barridos y cámaras rápidas. El control vive a nivel de formato, con menos dependencia de recetas opacas de cada marca.

Adaptación a la luz ambiente: del laboratorio al salón

Las salas reales no son cuevas de calibración. Paredes blancas, ventanales o lámparas cambian la percepción del contraste. HDR10+ Advanced mide el entorno y ajusta las curvas para preservar detalle en sombras y altas luces, reduciendo la sensación de “¿por qué todo está tan oscuro?” y evitando que un salón soleado lave la imagen. Si prefieres Filmmaker o Cinema, ahí siguen: el formato aplica ajustes sutiles sin traicionar la intención creativa.

Monitores y comodidad visual: ¿daño a la vista por 5.000 nits?

La inquietud es comprensible, sobre todo a distancia de escritorio. Pero los picos son localizados y breves, y los paneles actuales emplean limitadores de brillo sostenido y curvas de mapeo que mantienen el APL bajo control. En monitores, lo razonable es priorizar un brillo sostenido más bajo con highlights precisos. Y siempre puedes optar por un preset más oscuro y limitar el pico. El objetivo es contraste y gradación, no “flashbang” permanente.

Streaming y gaming: menos halos, negros con detalle

Para juegos – incluido cloud/streaming – Samsung promete movimiento más limpio y mejoras en local dimming y “tone-dimming”. Traducido: menos halos alrededor del HUD, sombras más estables en escenas rápidas y menos negros empastados en cinemáticas. Combinado con los perfiles por género y la adaptación ambiental, un mismo televisor puede pasar de una película nocturna a un partido al mediodía sin safari por el menú.

Cuándo y dónde llegará

Los planes de la marca sitúan la adopción inicial en la gama alta de 2026. En la parte de servicios, Amazon Prime Video sería el primer gran aliado en preparar soporte. Como siempre, no todos los modelos actuales recibirán firmware: entran en juego el chipset, las herramientas de masterización y la validación. Primero veremos títulos “escaparate” y, si cuaja entre creadores y público, se ampliará el catálogo.

Conclusión

HDR10+ Advanced no va de inflar cifras, sino de poner neuronas al brillo. Si cumple lo prometido, reducirá escenas demasiado oscuras, el “efecto telenovela” fuera de lugar y la necesidad de calibraciones eternas, acercando lo que se ve en casa a lo que imaginó el director. Si gana o no el pulso a Dolby Vision 2 es casi secundario: lo importante es que el HDR sea predecible, bonito y estable, da igual el género y da igual la habitación.