Han pasado ya más de tres años desde que Warner Bros. decidió archivar de forma repentina la película Batgirl, dirigida por Adil El Arbi y Bilall Fallah, y protagonizada por Leslie Grace junto a Michael Keaton, Brendan Fraser y Jacob Scipio. Lo que iba a ser un estreno importante para HBO Max terminó convirtiéndose en uno de los casos más polémicos de Hollywood: un proyecto casi terminado que fue cancelado para aprovechar una deducción fiscal.
Sin embargo, la esperanza de que algún día vea la luz sigue viva.
Jacob Scipio, uno de los actores principales, habló recientemente con The Direct y aseguró que mantiene la fe en que el filme pueda ser rescatado. “Tuve la oportunidad de verlo, y era una película fenomenal”, comentó. “Me da mucha pena que el público nunca haya podido disfrutarla. Pero nunca se sabe, Hollywood es un lugar muy curioso”. Scipio comparó la situación con la de Coyote vs. Acme, otra producción de Warner que también fue cancelada pero finalmente rescatada por Ketchup Entertainment, con estreno previsto para 2026. Para él, ese precedente demuestra que los milagros todavía existen en la industria.
En 2022, Warner Bros. tomó la decisión de cancelar Batgirl cuando el rodaje y gran parte de la posproducción ya estaban finalizados. El estudio justificó la medida como parte de una reestructuración interna tras la fusión con Discovery. Aun así, la noticia cayó como un balde de agua fría para los fans y para los propios directores, que calificaron la cancelación de “devastadora”. Muchos se preguntaron por qué destruir una película terminada, sobre todo cuando otros títulos menos inspirados sí llegaron a los cines.
Expertos del sector han explicado que, al declarar la película como pérdida fiscal, Warner Bros. no puede obtener beneficios de ella sin devolver las ventajas tributarias obtenidas. Es decir, un posible lanzamiento implicaría devolver millones de dólares al fisco. Pese a ello, Scipio mantiene la esperanza de que en el futuro surja un acuerdo que permita liberar Batgirl, tal como ocurrió con Coyote vs. Acme.
Para los seguidores del universo DC, no se trata solo de curiosidad: quieren ver el trabajo de los cientos de profesionales que participaron. Muchos esperan con ganas ver a Brendan Fraser en el papel del villano Firefly y el regreso de Michael Keaton como Batman. Mientras tanto, Batgirl sigue siendo un símbolo del sinsentido empresarial de Hollywood, donde a veces el arte se sacrifica por los números.