Aunque AMD sigue anunciando avances importantes en el sector de GPUs para inteligencia artificial, algunos analistas de Wall Street no están del todo convencidos. William Stein, de Truist Securities, reafirmó su calificación de “mantener” las acciones de AMD con un precio objetivo de 111 dólares, lo que implica un posible descenso del 20% respecto al valor actual.
Según él, muchas empresas estarían comprando productos de AMD únicamente para presionar los precios de NVIDIA, no porque realmente prefieran su tecnología.
Stein también mencionó un “acumulamiento significativo” de inventario en AMD que, según él, no tiene una explicación clara. Además, se refirió a la polémica desaparición del logo de AWS en presentaciones de AMD, sugiriendo que Amazon prefiere anunciar sus alianzas de manera independiente.
Pero AMD no se detiene. La compañía lanzó su línea MI350, que promete cuadruplicar el rendimiento en tareas de IA y multiplicar por 35 la capacidad de inferencia. También presentó ROCm 7, una plataforma de código abierto con mejoras notables en entrenamiento e inferencia. Y eso no es todo: la solución Helios con GPUs MI400 y CPUs Venice basadas en Zen 6 llegará en 2026, y su sucesora con GPUs MI500 está prevista para 2027.
Otros analistas, como C.J. Muse de Cantor Fitzgerald, ven un panorama más optimista: proyecta que AMD podría generar hasta 6 mil millones de dólares en ingresos por IA en el segundo semestre de 2025, gracias a estos lanzamientos.
Entre los usuarios, las opiniones también son claras: sin AMD, seguiríamos pagando fortunas por procesadores de cuatro núcleos y tarjetas gráficas con apenas 8 GB de VRAM. Muchos optan por AMD porque ofrece buena relación calidad-precio, eficiencia y una alternativa real a NVIDIA. Al final del día, no se trata de manipular el mercado, sino de hacer una compra inteligente.
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