Apple celebró su esperado evento “Awe dropping” y no decepcionó: la compañía presentó la nueva familia iPhone 17, el novedoso iPhone Air, tres relojes inteligentes renovados y los AirPods Pro 3. Más allá de los números y las especificaciones, la marca dejó claro que quiere marcar una nueva etapa en diseño y experiencia de usuario.
El plato fuerte fue el iPhone 17 Pro Max, con un precio inicial de 1.200 dólares.
Las reservas arrancan el 12 de septiembre y las entregas comienzan el 19 del mismo mes en 63 países. Apple subrayó su resistencia mejorada, una pantalla más brillante y un salto en fotografía computacional. Frente a rivales como el Samsung Galaxy S25 Ultra y el Google Pixel 10 Pro XL, este modelo busca consolidarse como el máximo referente en gama alta.
El iPhone 17 Pro, desde 1.100 dólares, conserva prácticamente el mismo poder, pero en un formato más compacto. La compañía lo presenta como la opción equilibrada entre potencia y tamaño. Por su parte, el iPhone Air se estrena con un precio de 1.000 dólares y apuesta por un diseño más ligero y delgado, dirigido a quienes buscan un dispositivo premium sin exceso de peso. Su competidor directo será el Galaxy S25 Edge.
El iPhone 17 básico parte de 800 dólares y se perfila como la puerta de entrada a la nueva generación. Con un precio más accesible, está pensado para quienes quieren la experiencia Apple sin llegar a los modelos Pro, rivalizando con el Galaxy S25 y el Pixel 10.
En el terreno de los wearables, se presentaron tres modelos: el Watch Series 11, desde 400 dólares con versiones en aluminio y titanio; el Watch SE 3, desde 250 dólares, que refuerza la gama de entrada; y el Watch Ultra 3, a partir de 800 dólares, diseñado para deportes extremos y aventuras al aire libre. Su competencia natural será el Galaxy Watch Ultra.
La guinda del pastel fueron los AirPods Pro 3, que llegarán el 19 de septiembre a 250 dólares. Traen mejoras en cancelación de ruido, sonido espacial y mayor autonomía, reafirmando la apuesta de Apple en el segmento de audio premium.
En definitiva, Apple no solo actualizó su catálogo: envió un mensaje claro de que busca abarcar a todo tipo de usuarios, desde los que priorizan el precio hasta los que desean lo último en innovación. Con esta ofensiva, la batalla con Samsung y Google promete ser más intensa que nunca.