La batalla legal en torno a Subnautica 2 sigue intensificándose, con los cofundadores del juego, Charlie Cleveland, Max McGuire y Ted Gill, ahora enfrentándose a una nueva demanda presentada por Unknown Worlds, el estudio que ellos mismos fundaron. Esta demanda llega poco después de que KRAFTON, la empresa matriz de Unknown Worlds, también presentara una demanda contra los tres. KRAFTON acusa a los cofundadores de haber abandonado sus roles en el desarrollo de Subnautica 2.
Ahora, Unknown Worlds se ha sumado al conflicto y ha presentado su propia demanda, respaldada por mensajes de Slack que, según se alega, apoyan las acusaciones de KRAFTON.
La demanda de Unknown Worlds repite muchas de las acusaciones ya planteadas en la demanda de KRAFTON. Se acusa a Cleveland y McGuire de haber abandonado el proyecto para dedicarse a proyectos personales, dejando al resto del equipo trabajando en solitario. Esto, según la demanda, afectó gravemente el desarrollo de Subnautica 2. Además, se les acusa de haber presionado para lanzar el juego rápidamente, con el fin de asegurar un lucrativo bono de 250 millones de dólares, incluso si eso significaba sacar al mercado un juego incompleto y con malas críticas. La demanda sostiene que los cofundadores actuaron por interés propio, lanzando un juego sin terminar para maximizar sus ganancias, a pesar de que esto perjudicó la calidad del juego y decepcionó a los fanáticos.
Desde la demanda inicial de KRAFTON, Cleveland, McGuire y Gill no han hecho declaraciones adicionales para explicar su versión de los hechos. La motivación detrás de la demanda de Unknown Worlds no está clara. Podría ser otro intento de KRAFTON para presionar a los excofundadores, o podría ser que algunos miembros actuales de Unknown Worlds realmente estén molestos con sus antiguos jefes. Lo que es seguro es que esta batalla legal sigue en curso, y probablemente nunca conoceremos todos los detalles detrás de esta disputa.
1 comentario
Esto es un desastre, pero ojalá no acaben con el juego por todo este lío legal