Cloud Chamber, el estudio encargado de BioShock 4, atraviesa una situación complicada tras confirmar despidos masivos.
Según el periodista Jason Schreier de Bloomberg, unos 80 empleados fueron despedidos de un equipo de 250 personas, lo que podría retrasar el lanzamiento del juego hasta finales de 2027.
Al mismo tiempo se anunció que Rod Fergusson, exgerente general de Diablo, asumirá la dirección del estudio. Take-Two confirmó los recortes y, en un correo interno, el presidente de 2K, David Ismailer, explicó que la reducción de personal busca rehacer elementos clave de la jugabilidad y dar más tiempo al proyecto. También aseguró que los afectados recibirán indemnización y apoyo profesional.
El plan original era lanzar el título entre finales de 2026 y principios de 2027. Sin embargo, con la reestructuración, las previsiones ahora se mueven a mediados o finales de 2027, si es que el juego logra cumplir con esa meta. De ser así, BioShock 4 habrá pasado más de una década en desarrollo.
El informe también resalta los desafíos de levantar un nuevo estudio y, a la vez, producir un juego AAA de gran presupuesto. Este doble reto ya ha hecho naufragar a otros proyectos en la industria. La gran incógnita es si BioShock 4 podrá tener el mismo impacto después de tantos años de espera.
Aun con los problemas, Take-Two ha invertido demasiado para abandonar la franquicia. Ahora toda la presión recae sobre Fergusson y el equipo que queda, que deberán demostrar que la larga espera valdrá la pena.