Cuando el gobierno de Estados Unidos entra en cierre administrativo, gran parte del país se paraliza: tribunales, agencias y oficinas federales suspenden sus actividades. Pero no todos pierden. En medio del caos político, algunas de las empresas más poderosas del mundo terminan beneficiadas. En este caso, Apple y Amazon son las grandes afortunadas. La paralización del gobierno, conocida como ‘shutdown’, ha detenido temporalmente los procesos antimonopolio que el Departamento de Justicia (DOJ) y la Comisión Federal de Comercio (FTC) llevan contra cuatro gigantes tecnológicos: Apple, Amazon, Google y Meta.
Con los casos de Apple y Amazon suspendidos, ambas compañías ganan tiempo y tranquilidad, algo muy valioso en el terreno judicial estadounidense.
Por el contrario, Google y Meta no tienen tanta suerte. Los procesos en su contra continúan avanzando. La diferencia está en la etapa de cada caso y en la decisión de los jueces. Los procedimientos contra Apple y Amazon están aún en fases iniciales: las audiencias y el intercambio de pruebas están programados para 2027. Los jueces aceptaron la solicitud del gobierno de pausar los casos hasta que se restablezca la financiación federal. Esto da a Apple un respiro estratégico para centrarse en otros frentes – como las investigaciones en Europa o sus próximos lanzamientos de productos – , mientras los fiscales del gobierno simplemente esperan a que el dinero vuelva a fluir.
En el caso de Google, el juez del Distrito de Columbia, Amit Mehta, decidió seguir adelante. Recordó que durante el cierre de 2019 los casos antimonopolio no se detuvieron, y consideró que este proceso ya está demasiado avanzado para pausarlo. Mehta está preparando un fallo que determinará si Google podrá seguir integrando su navegador Chrome con su motor de búsqueda y qué límites tendrá en sus acuerdos con fabricantes como Apple o Samsung. El juez fijó una audiencia clave para el 8 de octubre, sin importar si el gobierno sigue cerrado. Según expertos, quiere cerrar el caso antes de que los cambios tecnológicos lo vuelvan obsoleto.
Stephen Calkins, profesor de Derecho en la Universidad Estatal de Wayne, explica que Mehta actúa con pragmatismo: “Seguramente quiere terminar antes de que la tecnología cambie y el caso pierda relevancia”. En cambio, Apple y Amazon están en etapas tan tempranas que una pausa les resulta perfecta: les da margen para reorganizar sus estrategias y preparar su defensa con calma, algo que vale oro en la industria tecnológica.
El DOJ mantiene además otro frente abierto contra Google, esta vez por su presunto monopolio en el mercado de publicidad digital. Los abogados del gobierno pidieron también una suspensión del caso, pero el juez la rechazó. Cada juez tiene potestad para decidir si un proceso continúa o no durante un shutdown, y si lo ordena, los abogados públicos deben seguir trabajando incluso sin recibir salario. Un reflejo claro de cómo la parálisis afecta de forma desigual tanto a empresas como a empleados.
Por su parte, la FTC logró frenar temporalmente el proceso contra Amazon, al considerar que sería injusto continuar sin financiación. Este caso se centra en las acusaciones de que la empresa favorece sus propios productos dentro de su plataforma, perjudicando a los vendedores externos. Para Apple, el parón también es una buena noticia: el proceso sobre su supuesta conducta anticompetitiva en la App Store queda suspendido, dándole meses – quizá años – de respiro.
El sistema judicial federal anunció que los tribunales seguirán funcionando al menos hasta mediados de octubre, usando fondos de reserva y tasas judiciales. Durante el cierre de 2018, que duró cinco semanas, los tribunales también se mantuvieron abiertos, aunque con recursos muy limitados.
Sin embargo, la cuestión va más allá de lo técnico. Rebecca Haw Allensworth, profesora de la Universidad Vanderbilt, advierte que los jueces deben equilibrar la justicia con la realidad humana. “Pedir a un equipo de abogados que siga trabajando sin cobrar no es justo”, señala. Por eso, cada juez valora caso por caso si conviene seguir o hacer una pausa, intentando no perjudicar ni a las partes ni al personal público.
En conclusión, el shutdown ha alterado el tablero judicial: Apple y Amazon disfrutan de una tregua inesperada, mientras Google y Meta siguen bajo el escrutinio de los tribunales. En un giro irónico, el caos político en Washington se ha convertido en un inesperado aliado para el poder del Valle del Silicio.
1 comentario
Qué casualidad que los poderosos siempre salen beneficiados..