CoreWeave (CRWV), proveedor de servicios en la nube con enfoque en GPUs, está dando de qué hablar en el mundo de la inteligencia artificial. La empresa anunció la adquisición de Core Scientific, una exgigante del minado de criptomonedas, lo que le permitirá aumentar de forma significativa su capacidad energética para cargas de trabajo en IA y cómputo de alto rendimiento.
Kevin Dede, analista de H.C. 
Wainwright, mantiene una calificación ‘Neutral’ para las acciones de la compañía, pero reconoce que CoreWeave está jugando en otra liga. Dede destaca que fue la primera en desplegar a gran escala las nuevas GPUs de NVIDIA, incluyendo los modelos GB300 y GB200, marcando una clara ventaja competitiva que deja a sus rivales en la sombra.
Actualmente, CoreWeave ofrece dos soluciones potentes: el sistema GB300 NVL72, ideal para entrenar modelos de IA complejos, y el RTX PRO 6000 Blackwell, pensado para tareas creativas con gran carga visual. Esta variedad demuestra la versatilidad de la empresa para cubrir distintos segmentos del mercado tecnológico.
Más allá del hardware, CoreWeave tiene un modelo de negocio sólido. Alrededor del 96 % de sus ingresos proviene de contratos fijos con pagos por adelantado, lo que asegura estabilidad financiera. Además, utiliza sus GPUs de NVIDIA como garantía para obtener financiación, un enfoque estratégico poco común pero muy efectivo.
A pesar de una caída del 20 % en el último mes, las acciones de CoreWeave han subido un impresionante 214 % en lo que va del año. Con decisiones audaces, tecnología de punta y un modelo económico bien estructurado, la empresa se posiciona como uno de los jugadores más fuertes en el ecosistema de infraestructura para IA.