Daredevil: Born Again ha tenido un camino lleno de giros creativos incluso antes de estrenarse oficialmente. Una de las ideas más llamativas que nunca llegó a rodarse fue un episodio especial centrado en el Castigador y Echo. Según el guionista Jesse Wigutow, Marvel planeaba un capítulo tipo “bottle episode” en el que ambos personajes pasarían una noche entera juntos, no como romance, sino como un duelo narrativo intenso entre dos figuras heridas y violentas. 
Pero la idea se desechó cuando el estudio decidió reestructurar la serie en pleno rodaje.
Al principio, Born Again se concibió como un reinicio independiente, sin conexión directa con la versión de Netflix. Marvel quería un tono diferente, menos oscuro, más en sintonía con el estilo Disney+. Sin embargo, lo que se grabó no cumplía con las expectativas: el resultado parecía descafeinado frente al Daredevil que los fans amaban. Ante el riesgo de decepción, Marvel tomó un giro drástico y decidió regresar a la esencia de la serie original, retomando la crudeza y el realismo urbano que habían hecho tan popular al justiciero de Hell’s Kitchen.
Eso supuso grabar un nuevo piloto y un final diferente, además de añadir escenas con personajes conocidos de la era Netflix. Como consecuencia, tramas nuevas fueron reducidas o eliminadas, entre ellas el episodio del Castigador (Jon Bernthal) con Echo (Alaqua Cox). Según Wigutow, la idea era mostrar un choque moral y psicológico en un espacio reducido, donde los dos personajes expondrían sus métodos y contradicciones. Aunque la historia quedó descartada, el guionista insinuó que no está del todo muerta y que podría regresar algún día en otra producción de Marvel.
La cancelación de este episodio resulta significativa porque Echo y el Castigador representan extremos muy distintos del MCU. Echo, introducida en Hawkeye y luego protagonista de su propia serie, es un símbolo de renovación y diversidad. El Castigador, en cambio, es la cara dura y sangrienta de la etapa Netflix, que conquistó a los fans con un realismo brutal. Juntarlos habría sido un choque de estilos apasionante. Al final, Echo apenas aparece en la primera temporada de Born Again, mientras que Bernthal retomará su papel en un especial de Disney+ antes de saltar a la pantalla grande en Spider-Man: Brand New Day.
Wigutow admitió que el intento de alejarse del legado de Netflix no dio los frutos esperados: “Algunas cosas funcionaron, otras no”. El público quería continuidad, y Marvel terminó dándosela. Ahora, Born Again se plantea como una continuación directa de aquella historia, con Cox y D’Onofrio retomando el duelo central entre Matt Murdock y Wilson Fisk.
La segunda temporada, prevista para marzo de 2026, girará en torno a Fisk como alcalde de Nueva York. Habrá intrigas políticas, luchas de poder y el eterno pulso entre héroe y villano. Pese a la amplitud de la trama, Wigutow asegura que todo se reduce a esa relación de odio y necesidad entre Murdock y Fisk: dos hombres destinados a enfrentarse una y otra vez.
Marvel ya confirmó una tercera temporada, lo que demuestra que apuesta a largo plazo por esta serie, algo que parecía incierto tras la accidentada producción inicial. Wigutow, además, trabaja en paralelo en Tron: Ares, pero sigue comprometido con el universo de Daredevil.
En definitiva, el episodio perdido del Castigador y Echo es casi una metáfora del dilema actual de Marvel en el streaming: arriesgar con ideas nuevas o reforzar lo que ya funciona. Por ahora, el estudio ha optado por volver a las raíces más oscuras y violentas. Pero tal vez algún día veamos esa noche que pudo haber marcado historia en el MCU.