El esperado Donkey Kong Bananza de Nintendo ya ha generado algunas discusiones sobre el rendimiento del juego. El director del proyecto, Kazuya Takahashi, reconoció que en algunas partes del juego podría haber caídas de rendimiento, pero destacó que el equipo priorizó el «diversión y la jugabilidad» durante el desarrollo. 
En una entrevista con La Vanguardia, Takahashi respondió a las preocupaciones de un periodista sobre la fluidez del juego, explicando que el uso de efectos como el hit-stop y la cámara lenta podría provocar problemas temporales de rendimiento, especialmente en momentos con grandes cambios o destrucciones en el entorno, que usan tecnología voxel.
A pesar de estas caídas ocasionales, Takahashi aseguró que el juego se mantiene fluido en general y que la experiencia del jugador fue lo más importante. «Sabemos que el rendimiento puede bajar un poco en ciertos momentos», dijo. «Pero queríamos asegurarnos de que la experiencia global fuera divertida». Estas palabras reflejan la filosofía del equipo de centrarse más en el contenido atractivo que en la perfección técnica.
Donkey Kong Bananza se lanzará el 17 de julio a un precio de $69.99, exclusivo para Nintendo Switch 2. Las primeras críticas ya elogian el aspecto visual del juego, que, según algunos periodistas, aprovecha al máximo el hardware de la Switch 2. Sin embargo, como indican los primeros comentarios, no todos están convencidos de que la consola pueda mantener un rendimiento constante. Con los spoilers ya circulando en las redes sociales, si deseas evitar sorpresas, es mejor tener cuidado con lo que lees en línea.