Samsung sorprendió a los usuarios del Galaxy S25 Edge con el lanzamiento de la actualización estable One UI 8 basada en Android 16. Lo habitual es que primero reciban la nueva versión los modelos principales – Galaxy S25, S25+ y S25 Ultra – y que las variantes secundarias tengan que esperar.
Esta vez, sin embargo, el Edge fue incluido desde el inicio, colocándose al mismo nivel que los buques insignia de la familia.
Cuando la marca abrió el programa beta de One UI 8 en mayo, solo participaron los modelos centrales de la serie S25. El Edge quedó fuera porque apenas había salido a la venta y, siguiendo la costumbre de Samsung, los dispositivos alternativos como Fan Edition o Edge no suelen formar parte de las pruebas iniciales. Por eso llama tanto la atención que ahora el S25 Edge haya recibido directamente la versión estable junto a los demás.
La actualización comenzó en Corea del Sur con un paquete de 3,44 GB identificado bajo el firmware S937NKSU2BYI3. Los primeros usuarios reportan que la instalación se está realizando sin inconvenientes. Como es tradición, Samsung suele iniciar en su mercado local y pocos días después extender la actualización a nivel global. Para quienes viven fuera de Corea, lo mejor es revisar en Ajustes → Actualización de software → Descargar e instalar si ya está disponible.
En cuanto a novedades, One UI 8 no supone una revolución tan grande como lo fue One UI 7, pero aporta mejoras importantes en casi todos los apartados. La interfaz se siente más limpia con iconos renovados y elementos visuales más consistentes, además de apps del sistema modernizadas. El rendimiento en multitarea es más fluido, y se añadieron funciones para productividad, comunicación y automatización. La cámara gana opciones basadas en inteligencia artificial para edición y captura, mientras que Samsung Health amplía las métricas de seguimiento de actividad y bienestar. La seguridad y la privacidad reciben un fuerte impulso con nuevos controles sobre permisos, y también se incluyen herramientas de accesibilidad para una experiencia más inclusiva.
Con este movimiento, el Galaxy S25 Edge – ya valorado por su pantalla curva y diseño premium – queda totalmente alineado en software con los otros modelos de la gama S25. La compañía demuestra así que no considera al Edge un modelo secundario, sino parte integral de la serie.