Samsung vuelve a estar en boca de todos: acaban de filtrarse imágenes de los supuestos modelos de prueba del Galaxy S26 Ultra, y el tema está encendiendo las redes. No por su procesador ni su cámara, sino por algo mucho más visible: un color naranja tan intenso que no deja indiferente a nadie. 
O lo amas o lo odias.
Las fotos, publicadas inicialmente por una fuente menor y luego difundidas en X (antes Twitter), muestran tres posibles versiones del próximo buque insignia de Samsung: un naranja brillante, un blanco plateado y un gris titanio. El más comentado, claro, es el naranja, que parece tener una vibra similar al ‘Cosmic Orange’ del iPhone 17 Pro. Si esta filtración resulta cierta, Samsung estaría apostando fuerte por un diseño más atrevido y expresivo.
Curiosamente, este nuevo color coincide con el del Galaxy Watch Ultra, lo que sugiere que la compañía busca una identidad visual coherente entre sus dispositivos premium. Imagina el combo: un reloj y un móvil con el mismo tono llamativo, imposible no destacar. Y si prefieres algo más sobrio, las otras dos opciones – White Silver y Titanium Gray – siguen transmitiendo ese aire elegante y profesional que caracteriza a la línea Ultra.
Pero las filtraciones no solo hablan de colores. También muestran un diseño ligeramente renovado, con bordes más redondeados y un cuerpo más ergonómico. El módulo de cámaras parece estar mejor integrado, pintado del mismo color que el resto del teléfono, lo que le da un aspecto más limpio y unificado. En conjunto, el S26 Ultra se asemeja más al Galaxy S25 Edge, lo que podría indicar que Samsung busca unificar el lenguaje visual de toda la serie Galaxy S26.
Según los rumores, esta unificación podría venir acompañada de cambios en los nombres: el modelo base pasaría a llamarse Galaxy S26 Pro, el Plus desaparecería para dejar espacio al Galaxy S26 Edge y el Ultra mantendría su lugar como el más premium. Tiene sentido si la idea es mantener una estética coherente en toda la línea, aunque no todos los fans estén contentos con ello. Muchos prefieren el diseño cuadrado y robusto que daba al Ultra una presencia más única. Otros, en cambio, celebran el nuevo look más suave y moderno.
Eso sí, hay que tomar todo esto con precaución. Se trata de unidades dummy, es decir, modelos no funcionales usados por fabricantes de accesorios para preparar fundas antes del lanzamiento oficial. Es posible que el diseño final cambie. Sin embargo, el debate ya está servido: ¿se convertirá el naranja en el nuevo color insignia de Samsung o será solo un experimento visual?
De confirmarse, este cambio marcaría un paso audaz en la estrategia de la marca. El naranja simboliza energía, creatividad y confianza – valores que encajan perfectamente con una Samsung que quiere destacar frente a la sobriedad de Apple. Una cosa es segura: el Galaxy S26 Ultra no pasará desapercibido. Sea amado o criticado, será el protagonista de 2026.