La gama Galaxy Watch 2025 de Samsung es… digamos, algo decepcionante. La palabra “interesante” parece ser la mejor manera de describir la Galaxy Watch 8, la Watch 8 Classic y la segunda generación de la Watch Ultra. Claro, “interesante” es un término que se usa cuando no hay mucho más que decir, y eso es exactamente lo que transmite esta serie.
Son funcionales y confiables, pero no generan entusiasmo.
Lo que más me molesta es la falta de opciones de colores. Si bien para los teléfonos móviles esto no es un gran problema, para los smartwatches es una historia diferente. Estos dispositivos son tanto gadgets tecnológicos como accesorios de moda, y el diseño y los colores juegan un papel clave. El Galaxy Z Fold 7, por ejemplo, se lanzará en un llamativo color Coral Red, mientras que la Galaxy Watch 8 estará disponible solo en gris y plata, y la Watch 8 Classic solo tendrá opciones en negro y blanco.
La Galaxy Watch Ultra 2025 suena un poco más emocionante, con modelos Titanium Blue, Titanium Gray y Titanium Silver, pero seamos sinceros, incluso el modelo “azul” parece un poco aburrido.
Además, la falta de opciones de tamaños en los modelos más resistentes es un gran problema. La Galaxy Watch Ultra de primera generación, al igual que la Apple Watch Ultra, solo está disponible en un tamaño, y parece que la próxima Galaxy Watch Ultra tampoco tendrá tamaños variados. Claro, un modelo más pequeño podría reducir la duración de la batería, pero definitivamente hay un mercado para relojes resistentes más compactos. Si Garmin puede ofrecer varios tamaños, ¿por qué no lo podría hacer Samsung?
El mismo problema ocurre con la Galaxy Watch 8 Classic: ¿por qué ofrecer solo un tamaño cuando la Galaxy Watch 6 Classic estuvo disponible en dos tamaños? No lo entiendo. Samsung, ¿qué están pensando?
En cuanto a la Galaxy Watch Fan Edition (FE), para mí es la mejor de toda la línea Galaxy Watch. No tiene todas las funciones de gama alta, pero el precio por lo que ofrece es insuperable. Samsung debería considerar seriamente lanzar una nueva versión de la FE lo antes posible, tal vez basada en la Galaxy Watch 6 o la Watch 7, porque por unos 200 dólares, sería una excelente alternativa a los modelos más caros.
Y si nos imaginamos una Galaxy Watch Edge… Súper fina, ligera, con una pantalla AMOLED increíble y todas las funciones de monitoreo de salud y fitness más avanzadas. Eso podría ser posible, y espero que Samsung lo considere, aunque sé que la duración de la batería podría ser un problema.