El Galaxy Z Fold 7 de Samsung ya está dando de qué hablar, y no solo por su diseño futurista y pantalla plegable ultra delgada, sino también por el dineral que podrías tener que pagar si se te cae. 
Aunque cuesta $2,000 de entrada, una reparación puede elevar el gasto total a unos increíbles $3,500.
Y no estamos hablando de una edición especial ni nada por el estilo. Es simplemente el costo de arreglar las pantallas. Un proveedor europeo de piezas originales de Samsung reveló que cambiar la pantalla interna cuesta €761 (unos $890), y la pantalla externa otros €525 (alrededor de $611).
O sea que si rompes ambas -y siendo honestos, más de uno lo hará- estarías pagando $1,501 solo en pantallas. A eso hay que sumarle el costo de la mano de obra.
Además, la garantía estándar no cubre daños accidentales. Por eso existe Samsung Care+, un plan adicional que incluye reparaciones por $29 cada vez, con una suscripción de $13 al mes o $259 al año para el Z Fold 7.
En el caso del Galaxy Z Flip 7, la pantalla principal cuesta alrededor de $400 y la pantalla exterior unos $240. Su plan Care+ es un poco más barato: $10 al mes o $169 al año.
En resumen: si vas a comprar un plegable, trátalo como si fuera de cristal (porque básicamente lo es). Una caída puede costarte tanto como un celular nuevo.