Apple vuelve a sacudir el mercado con la llegada de la familia iPhone 17. Todos los modelos incluyen ahora el chip N1, un procesador de conectividad inalámbrica diseñado por la propia compañía. 
Este movimiento no es menor: supone dejar atrás a proveedores como Broadcom y asumir un control total sobre Wi-Fi, Bluetooth y la integración con dispositivos inteligentes del hogar.
La jugada era previsible. El año pasado, con el iPhone 16e, Apple ya había mostrado sus intenciones al lanzar el modem C1 de desarrollo propio. El N1 representa el siguiente paso. Aunque Apple no ha confirmado detalles técnicos, se cree que está fabricado en el proceso de 4nm (N4P) de TSMC, lo que le daría un 30% más de eficiencia energética frente a las soluciones tradicionales. Para modelos ultradelgados como el iPhone Air, ese ahorro puede marcar la diferencia en la autonomía.
El punto fuerte es la llegada de Wi-Fi 7. Con canales de 320 MHz, este estándar alcanza velocidades de hasta 46 Gbps, el doble que Wi-Fi 6. Además, la función MLO (Multi-Link Operation) permite usar simultáneamente las bandas de 2.4, 5 y 6 GHz, ofreciendo conexiones más estables, menor latencia y un rendimiento mucho más fluido, ideal para gaming y streaming.
El Bluetooth 6.0 también supone un salto. Apple asegura una latencia inferior a 20 ms, lo que hace prácticamente instantánea la reproducción de audio en AirPods o auriculares compatibles. A eso se suma mayor alcance, menor consumo de energía y una seguridad reforzada. Todo esto se traduce en una experiencia inalámbrica más cómoda y confiable.
En el terreno del hogar inteligente, el N1 incorpora soporte para Thread, protocolo clave dentro del estándar Matter. Para quienes usan HomeKit, esto significa luces y accesorios que responden más rápido, menos cortes en la conexión y un ecosistema más robusto. El iPhone se convierte cada vez más en el mando central de la vida digital.
Un detalle clave es cómo el N1 trabaja junto con el modem C1X 5G. Apple puede así coordinar el consumo y el rendimiento de manera más fina, alternando entre Wi-Fi y datos móviles según convenga. Falta ver qué dicen las pruebas de batería en la práctica, pero la expectativa es alta.
Algunos usuarios argumentan que basta con comprar un adaptador Bluetooth 6 barato en internet para obtener mejoras similares. Pero ahí está la diferencia: la propuesta de Apple es totalmente integrada, sin configuraciones extra ni soluciones improvisadas. Para los compradores del iPhone 17, el N1 no es solo un detalle técnico, es la columna vertebral de una experiencia inalámbrica más veloz, estable y eficiente.