El iQOO 15 está a punto de ser presentado oficialmente y ya se perfila como uno de los smartphones más potentes e interesantes del año.
La marca confirmó varias especificaciones clave que muestran un salto importante respecto a la generación anterior. Si antes la familia iQOO destacaba sobre todo por su rendimiento extremo y enfoque en juegos, ahora el iQOO 15 combina potencia bruta con funciones premium pensadas para el uso diario.
La novedad más esperada es la carga inalámbrica, que por fin llega a la serie después de años de rumores. Un detalle que muchos usuarios pedían y que coloca al iQOO 15 al nivel de otros grandes competidores en cuanto a comodidad.
En resistencia también sorprende: cuenta con certificaciones IP68 e IP69, lo que garantiza no solo protección contra polvo y agua, sino incluso contra chorros de agua a alta presión. Un añadido poco común en móviles gaming, pero muy útil para quienes buscan mayor durabilidad.
El sensor ultrasónico de huellas dactilares también se ha renovado, ofreciendo un desbloqueo más rápido y preciso que el visto en el iQOO 13. Unido al procesador Snapdragon 8 Elite Gen 5 de Qualcomm, el rendimiento promete ser inmediato tanto en juegos exigentes como en multitarea.
La pantalla es otro de sus puntos fuertes: un panel AMOLED de 6,85 pulgadas fabricado por Samsung, con resolución QHD, tasa de refresco de 144Hz y un brillo máximo de 2.600 nits. En otras palabras, fluidez total, colores intensos y visibilidad perfecta incluso bajo el sol.
El puerto USB-C con soporte para USB 3.2 garantiza además transferencias de archivos mucho más rápidas. Para quienes mueven grandes vídeos o juegos pesados, esta mejora será clave.
Según rumores desde China, la presentación oficial tendría lugar el 15 de octubre. De confirmarse, estaríamos ante un smartphone que podría convertirse en el mejor equilibrio entre precio y prestaciones del mercado, capaz de competir de tú a tú con rivales como el Realme GT8 Pro.