KRAFTON, propietaria del estudio Unknown Worlds, ha contraatacado en la disputa legal con sus fundadores, acusándolos de haber abandonado sus cargos y de haber frenado el desarrollo de Subnautica 2.
En un documento presentado el 12 de agosto de 2025, KRAFTON afirma que Charlie Cleveland y Max McGuire dejaron de ejercer como director creativo y director técnico en julio de 2023, dejando al equipo sin liderazgo claro.
El conflicto comenzó cuando Cleveland, McGuire y el también cofundador Ted Gill demandaron a KRAFTON tras ser despedidos y después de que el lanzamiento de Subnautica 2 se retrasara de 2025 a 2026. Mientras los fundadores alegan despido improcedente, KRAFTON sostiene que ya habían dejado el proyecto mucho antes de su salida oficial.
Según KRAFTON, tras la compra del estudio, Cleveland y McGuire cobraron su parte y perdieron interés en el juego, centrándose en proyectos personales -Cleveland, supuestamente, en el cine-, mientras que Gill se enfocó más en maximizar su pago final que en avanzar en el desarrollo. El documento también cita a un líder del equipo afirmando que la versión de acceso anticipado representaba solo el 12% del contenido final previsto, bromeando con que “a este ritmo, tardaríamos 30 años en terminar”.
KRAFTON asegura que los fundadores rechazaron volver a sus puestos, y que Gill incluso dijo: “no se puede volver a un trabajo que ya no existe”. Cleveland, por su parte, habría admitido que desde el principio la idea era que una nueva generación de desarrolladores liderara la secuela y que él no planeaba dirigir el equipo.
La batalla legal podría prolongarse durante meses o incluso años. Por ahora, es imposible saber quién dice la verdad, pero la disputa ya ha ensombrecido uno de los títulos indie más esperados de los últimos años.