El diseño Liquid Glass en iOS 26 me hizo soñar con un posible regreso del iPhone mini. Apple acaba de presentar iOS 26 y la primera versión beta ya está disponible, con la versión final esperada para septiembre, junto con la serie iPhone 17.
Una de las novedades más interesantes es el Liquid Glass, un diseño que combina la apariencia del vidrio con una textura fluida y dinámica.
Liquid Glass se centra en dar más protagonismo al contenido, al mismo tiempo que ofrece una interfaz más dinámica y personalizada. Esto forma parte de la iniciativa más amplia de Apple para expandir el uso de superficies similares al vidrio, como las que se usan en visionOS (para el Vision Pro), a otros dispositivos como los iPhones, iPads y Macs.
Craig Federighi, el director de software de Apple, explicó que este enfoque de diseño es especialmente atractivo porque crea la ilusión de que los elementos de la interfaz no ocupan tanto espacio. Y eso me hizo pensar: si Liquid Glass tiene como objetivo maximizar el uso del espacio limitado, ¿podría esto abrir la puerta al regreso de teléfonos con pantallas más pequeñas?
Seamos sinceros: siempre he sido un gran fan del iPhone mini, especialmente del iPhone 13 mini. No se trata de las especificaciones o características llamativas, sino del tamaño. Simplemente se siente bien: lo suficientemente pequeño como para usarlo con una mano, fácil de llevar y no da la sensación de estar sosteniendo una tablet. Apple presentó el mini con la línea iPhone 12, luego siguió con el iPhone 13 mini. Lamentablemente, esa fue la última vez que vimos un mini y desde entonces no ha habido más.
Llevo usando mi iPhone 13 mini durante cuatro años y, sinceramente, no tengo ganas de cambiarlo solo por una pantalla más grande que nunca pedí. Y sé que no soy el único que piensa así. Claro, las ventas no jugaron a nuestro favor, por lo que Apple siguió adelante. El mini fue reemplazado por el modelo Plus y, según los rumores, Apple planea lanzar un iPhone 17 Air superdelgado. Elegante, pero de nuevo, no compacto.
Lo que realmente me atrae de iOS 26 es cómo esta nueva filosofía de diseño parece maximizar el uso del espacio disponible. En lugar de simplemente apilar más elementos de interfaz, el diseño se fusiona con el fondo, dejando que el contenido brille y creando una sensación de apertura y espacio. Esto es especialmente útil en pantallas más pequeñas, donde los elementos tradicionales de la interfaz como botones y barras de navegación suelen ocupar mucho espacio. Pero con el estilo transparente y difuso de Liquid Glass, el contenido debajo de la interfaz sigue siendo visible, lo que reduce el desorden y ofrece más espacio para el contenido.
Claro, la beta actual tiene algunos errores, como problemas de legibilidad debido al nuevo estilo translúcido, pero es probable que estos problemas se resuelvan antes del lanzamiento final. Apple ha sugerido que los desarrolladores utilicen este diseño para los elementos de navegación, lo que significa que las aplicaciones de terceros también podrían adoptar este aspecto, reduciendo el desorden visual y creando una experiencia más limpia y abierta.
Imaginen lo perfecto que quedaría esto en un teléfono compacto. Parece el tipo de diseño que podría devolver los teléfonos pequeños al debate, tal vez no de inmediato, pero quizás después de que Apple saque el iPhone 17 Air. Una vez que se resuelva eso, tal vez Apple se atreva a traer de vuelta los modelos mini con un diseño que realmente apoye los teléfonos compactos.
Las pantallas más pequeñas tienen ventajas reales: son más fáciles de usar con una mano, más portátiles y ofrecen menos distracciones. Además, son dispositivos excelentes si ya usas un Mac o un iPad. No todo el mundo está pidiendo un teléfono pequeño, pero tampoco todo el mundo quiere uno gigante.
Tal vez Liquid Glass sea el primer paso para el regreso de los iPhones compactos. Podría cambiar la forma en que vemos cómo los iPhones se ven y se sienten, sin sacrificar el espacio para el contenido. El rediseño rumoreado para 2027, conocido como “Glasswing”, podría ser la revolución que estamos esperando: un dispositivo con vidrio curvado, bordes súper finos y sin cortes. Tal vez el teléfono no sea más pequeño, pero la experiencia general podría sentirse más inmersiva y menos congestionada. No es un regreso inmediato del mini, pero Apple definitivamente está explorando ideas que podrían hacer que los teléfonos compactos dejen de ser un compromiso.