MediaTek ha presentado oficialmente su nuevo procesador estrella: el Dimensity 9500. No se trata de una simple actualización respecto al 9400, sino de un salto ambicioso que busca redefinir lo que un chip de gama alta puede ofrecer en inteligencia artificial, videojuegos móviles y eficiencia energética. Con estas credenciales, la compañía se prepara para enfrentarse de tú a tú con el próximo Snapdragon 8 Elite Gen 5 de Qualcomm y, de paso, incomodar a Apple en su terreno.
El Dimensity 9500 apuesta por una arquitectura “All Big Core”, es decir, todos los núcleos son de alto rendimiento.
La configuración incluye un núcleo Arm C1-Ultra a 4,21 GHz, tres núcleos C1-Premium y cuatro C1-Pro. En total, ocho núcleos capaces de ofrecer, según MediaTek, un 32 % más de potencia en tareas de un solo hilo y un 17 % más en multi-core respecto al Dimensity 9400. Lo más sorprendente es que el núcleo ultra consume hasta un 55 % menos energía en picos de rendimiento, y en multitarea general el ahorro puede llegar al 30 %. Esto significa más autonomía sin sacrificar velocidad.
En el apartado gráfico, la nueva GPU Arm G1-Ultra promete hasta un 33 % más de rendimiento máximo y un 42 % más de eficiencia energética. Además, duplica las unidades de ray tracing y logra un 112 % más de velocidad en este tipo de cálculos. El resultado: juegos a 120 fps con interpolación y soporte para Vulkan RT, así como las últimas funciones de Unreal Engine 5 como MegaLights y Nanite. Con este salto, los gráficos móviles se acercan cada vez más a la experiencia de consola.
También hay mejoras en almacenamiento: la compatibilidad con UFS 4.1 de cuatro canales duplica la velocidad de lectura secuencial. En fotografía y vídeo, el nuevo ISP Imagiq 1190 permite procesar imágenes RAW de hasta 200 MP, ofrece enfoque continuo a 30 fps y graba retratos en 4K a 60 fps. La tecnología MiraVision Adaptive Display complementa la experiencia con mejor HDR y colores más vivos.
Pero donde MediaTek quiere brillar realmente es en IA. Su NPU 990 de novena generación con Generative AI Engine 2.0 duplica la potencia de cálculo frente al modelo anterior. Incorpora procesamiento BitNet de 1,58 bits, lo que reduce el consumo en un tercio, mientras mantiene un 100 % más de velocidad en modelos de lenguaje con hasta 3 mil millones de parámetros. También soporta contextos largos de 128K tokens y generación de imágenes en 4K. Gracias a la arquitectura compute-in-memory, puede ejecutar modelos de forma continua sin agotar la batería.
En conectividad, el Dimensity 9500 tampoco se queda atrás. Reduce el consumo un 10 % en 5G y un 20 % en Wi-Fi. Además, la agregación de cinco portadoras aumenta el ancho de banda un 15 %. Las funciones de selección de red asistidas por IA reducen la latencia un 50 %, mientras que la precisión en posicionamiento mejora un 20 %. Todo esto se traduce en mejor rendimiento en videollamadas y juegos online.
El chip debutará en terminales como el Oppo Find X9 Pro y el Vivo X300 antes de fin de año. Aunque las cifras son prometedoras, los analistas recuerdan que la verdadera prueba está en el uso diario: gestión térmica, estabilidad y software optimizado serán claves para que rinda al máximo. Aun así, esta generación podría ser la primera en la que MediaTek logre superar a Qualcomm en ciertos aspectos. Para los usuarios, la buena noticia es que la competencia traerá móviles más potentes y equilibrados.
En definitiva, el Dimensity 9500 llega con fuerza: CPU de alto rendimiento, gráficos dignos de consola, motor de IA avanzado y un enfoque claro en eficiencia energética. La batalla Snapdragon contra Dimensity sube de nivel, y el mayor beneficiado será el consumidor final.