Los ambiciosos planes de Microsoft para desarrollar sus propios chips de IA se han encontrado con serios obstáculos, lo que ha obligado a la compañía a replantearse su estrategia. Según un informe reciente de The Information, los problemas de diseño han causado un retraso en la producción del chip Braga, que inicialmente debía comenzar a fabricarse en masa en 2025.
Este retraso ha generado preocupaciones sobre la competitividad de los chips, especialmente en comparación con las soluciones poderosas de NVIDIA.
Al igual que otros gigantes tecnológicos como Amazon y Google, Microsoft está desarrollando sus propios chips de IA para reducir la dependencia de los caros chips de NVIDIA. Sin embargo, siendo una empresa centrada principalmente en el software, Microsoft tiene experiencia limitada en el diseño de chips, lo que ha complicado el proceso. Debido al retraso del chip Braga, la compañía ha ajustado sus planes y ahora planea lanzar un chip intermedio en 2027, que estará entre el Braga y sus sucesores.
Este nuevo chip, que probablemente se llamará Maia 280, se espera que combine dos chips Braga para aumentar el rendimiento. Microsoft busca una mejora de eficiencia del 30% en comparación con los chips de NVIDIA de 2027. El objetivo final de la empresa es producir cientos de miles de chips de IA cada año, intentando competir con NVIDIA en términos de rendimiento por vatio, un indicador clave para las aplicaciones de IA. A pesar de estos esfuerzos, NVIDIA sigue siendo el líder indiscutible en el mercado de chips de IA, con sus chips Blackwell ya en producción y sus chips de próxima generación, Rubin, en desarrollo.
El creciente interés en los chips personalizados está llevando a empresas como Broadcom y Marvel a ver un aumento en la demanda de sus propias soluciones. Sin embargo, el mercado sigue siendo dominado por NVIDIA, cuyo ventaja competitiva sigue siendo un obstáculo importante para que otros actores intenten ingresar al mercado.