Un modder chino decidió llevar las consolas portátiles al extremo y construyó un dispositivo enorme con una tarjeta gráfica NVIDIA GeForce RTX 4090 (versión para portátil) y un procesador Intel Core i9-14900HX.
El creador, conocido como Qingchen DIY en Bilibili, montó la placa base de un portátil en una pantalla de 12,5 pulgadas, con 64 GB de memoria DDR5-5600 y un SSD de 2 TB, manteniendo joysticks, gatillos y el diseño típico de una consola portátil.
El rendimiento es impresionante: en las pruebas, el aparato corrió God of War, Horizon Forbidden West y Cyberpunk 2077 en 4K nativo con total fluidez, algo que la mayoría de portátiles apenas logra en 1080p
. La temperatura de la GPU se mantuvo en torno a los 72°C durante las partidas, gracias al sistema de refrigeración integrado del portátil, algo notable para una máquina tan potente.
Claro que la portabilidad aquí es más bien teórica: la batería debe durar poquísimo y el tamaño se asemeja más a una consola transportable que a un verdadero dispositivo de bolsillo. Aun así, como proyecto DIY, es una gran demostración de lo que pasa cuando se olvidan las limitaciones de peso, tamaño y consumo para buscar el máximo rendimiento.