NVIDIA presentó Spectrum-X Ethernet Photonics, los primeros ópticos coempaquetados de 200G del mundo, diseñados para cambiar por completo la manera en que funcionan los centros de datos de IA. 
A diferencia de los transceptores enchufables tradicionales, aquí los motores fotónicos se integran directamente con el ASIC del switch, reduciendo el consumo de energía y aumentando la fiabilidad.
El problema que busca resolver es claro: las llamadas “fábricas de IA” consumen hasta 17 veces más energía óptica que un centro de datos en la nube convencional. Alrededor del 10% de toda la potencia de cálculo se va en redes. Con Spectrum-X, ese gasto se reduce drásticamente gracias a la disminución de láseres y la eliminación de trazas largas en PCB. Un enlace de 1,6 Tb/s, por ejemplo, pasa de ocho láseres a solo dos.
Durante Hot Chips 2025, NVIDIA mostró Spectrum-X como la primera implementación de 200 G/lane SerDes con fotónica de silicio. El uso de moduladores de microanillo (MRMs) y el apilamiento 3D entre capas electrónicas y fotónicas aumenta la densidad de ancho de banda y simplifica el diseño. La producción en colaboración con TSMC asegura que el sistema esté listo para escalar.
Los beneficios son contundentes: 3,5× más eficiencia energética, 10× mayor resiliencia y un despliegue 30% más rápido que la óptica tradicional. El switch insignia Spectrum-6 102T sustituye 64 transceptores, duplica el rendimiento y mejora la integridad de señal 63 veces, usando muchos menos láseres.
En definitiva, NVIDIA no solo apuesta por más velocidad, sino por rediseñar la arquitectura de los centros de datos de IA. Al liberar energía de la red y devolverla a los clústeres de GPU, se potencia el verdadero rendimiento. Con Spectrum-X, los fotones dejan de ser una promesa futurista y se convierten en la base del crecimiento de la computación en IA.