Después de una espera mucho más larga de lo previsto, el OnePlus 15 por fin cruza la frontera y aterriza oficialmente en Estados Unidos. El lanzamiento se había quedado atascado en un embrollo burocrático: el prolongado cierre del gobierno paralizó parte del trabajo de la FCC, el organismo que debe certificar los dispositivos antes de que puedan venderse en el país. 
Mientras Europa y otros mercados ya llevaban meses probando el nuevo buque insignia de la marca, los usuarios estadounidenses solo podían mirar reviews en YouTube y soñar con importarlo. Esa etapa quedó atrás: los papeles están en regla y OnePlus vuelve a pelear en uno de los mercados más duros del mundo.
Fecha de lanzamiento y precios en Estados Unidos
OnePlus iniciará la venta del OnePlus 15 en Estados Unidos el 4 de diciembre a las 11:00 AM hora del Este, a través de su tienda online oficial. De salida habrá dos configuraciones. La versión base combina 12 GB de RAM con 256 GB de almacenamiento interno por 900 dólares. Para quienes necesitan todavía más margen para fotos, vídeos y juegos, habrá una variante con 16 GB de RAM y 512 GB de almacenamiento por 1.000 dólares.
En ambos casos hablamos de modelos 5G sin bloqueo de operador, es decir, no van atados a una sola compañía. El cliente compra directo a OnePlus y luego elige con qué operador usará el teléfono, siempre que la red sea compatible con las bandas soportadas por el dispositivo. En un país donde los acuerdos exclusivos con operadoras siguen siendo habituales, este detalle no es menor.
Cómo queda frente a Europa y Reino Unido
Fuera de Estados Unidos, el OnePlus 15 también se sitúa claramente en el segmento premium. En la zona euro, la versión de 12 GB de RAM y 256 GB de almacenamiento se vende por 949 euros, mientras que el modelo con 16 GB y 512 GB cuesta 999 euros. En Reino Unido, los mismos configuraciones se colocan en 849 y 879 libras respectivamente.
Con estos precios, el OnePlus 15 se sienta en la misma mesa que los grandes pesos pesados del mercado. Aun así, suele salir algo más barato que muchas variantes de iPhone y Galaxy con capacidades de memoria similares. Es la receta clásica de la marca: especificaciones de gama alta, software ágil y limpio, pero sin llegar a los niveles de precio más extremos del escaparate.
Regalos de lanzamiento para los primeros compradores
Para compensar la llegada tardía y, de paso, generar ruido en el estreno estadounidense, OnePlus ha preparado una campaña de lanzamiento bastante agresiva. Mientras haya stock, quienes compren un OnePlus 15 en Estados Unidos podrán elegir un regalo en el momento de hacer el pedido. La lista de opciones no está nada mal: el reloj inteligente OnePlus Watch 3 en tamaño de 43 mm, los auriculares totalmente inalámbricos OnePlus Buds Pro 3, el cargador magnético AirVOOC de 50 W para carga rápida inalámbrica o una funda oficial para el OnePlus 15.
En la práctica, no hace falta ser adivino para saber qué se agotará primero. El reloj y los Buds Pro 3 son los objetos de deseo y probablemente desaparecerán en cuestión de minutos, en cuanto se abra la venta. Quien se lo piense demasiado puede terminar con menos alternativas y tener que escoger entre la base de carga o la funda. OnePlus ya ha recurrido a este tipo de estrategia otras veces: en lugar de recortar el precio del móvil, ofrece regalos limitados que crean sensación de urgencia y premian a los más rápidos.
Por qué el OnePlus 15 tardó tanto en llegar a EE. UU.
Lo curioso de toda esta historia es que el problema no estuvo en la fábrica ni en la demanda, sino en la burocracia. El largo parón del gobierno estadounidense desordenó el calendario de la FCC, que vio cómo se acumulaba una montaña de dispositivos a la espera de pruebas y certificados. Sin esa luz verde oficial, ningún smartphone puede salir a la venta legalmente, por mucho que esté listo y funcionando en otros países.
Mientras tanto, en Europa y otros mercados el OnePlus 15 ya formaba parte del día a día de muchos usuarios, mientras en Estados Unidos la comunidad se conformaba con comentarios, filtraciones y comparativas. Ahora que la FCC ha despejado el atasco, OnePlus puede volver a tratar el mercado estadounidense como una prioridad para su gama alta. Y de paso deja una lección clara: detrás de cada gran lanzamiento hay laboratorios, mediciones, normas y funcionarios que casi nadie ve, pero que pueden frenar o acelerar la llegada de un producto.
iPhone contra Android: la batalla en los comentarios
Como era de esperar, en cuanto se confirmó el estreno del OnePlus 15 en Estados Unidos, las redes y los foros se llenaron de opiniones enfrentadas. Hay quienes insisten en que, en el mercado estadounidense, solo el iPhone cuenta de verdad y que todo lo demás es poco menos que un experimento chino. Algunos comentarios se pasan de frenada y hablan del OnePlus 15 como si fuera basura electrónica que la marca debería enviar a Marte en lugar de venderla en América.
Si se baja un poco el volumen al drama, la realidad es más matizada. Para la gente que está completamente integrada en el ecosistema de Apple, con Mac, iPad y iMessage, cambiar a un Android, por muy potente que sea, nunca será una decisión fácil. Pero para usuarios que valoran una interfaz fluida, un Android relativamente limpio, carga muy rápida y un hardware ambicioso sin pagar el precio máximo del mercado, el OnePlus 15 pinta como una opción muy tentadora.
Con la venta oficial ya confirmada, esos usuarios por fin pueden comprar el dispositivo en su propio país sin recurrir a importaciones ni a modelos antiguos. Convencer a un fan extremo del iPhone quizá no sea el objetivo principal. Lo importante es que el catálogo de gama alta en Estados Unidos suma un competidor más, con especificaciones de primer nivel, un precio todavía competitivo dentro del segmento premium y regalos llamativos para los que estén atentos el día del lanzamiento.