Google presentó por fin el Pixel 10 Pro Fold en su evento Made by Google 2025, con Jimmy Fallon como anfitrión sorpresa.
Pero más allá del show, lo que realmente brilló fue el nuevo plegable de la compañía: un dispositivo que deja de ser un experimento para convertirse en un referente de la categoría.
El Pixel 10 Pro Fold no busca reinventar el formato, sino perfeccionarlo. A simple vista recuerda al Pixel 9 Pro Fold, pero los ajustes marcan la diferencia: un bisagra sin engranajes que lo hace más cómodo y resistente, con una vida útil de hasta 180.000 pliegues (unos 10 años de uso diario). Además, es el primer plegable con certificación IP68, lo que significa resistencia total al agua y al polvo, reforzado con Gorilla Glass Victus 2.
Por dentro, integra el nuevo Tensor G5 y 16 GB de RAM, preparados para potenciar funciones de IA. Entre ellas está Magic Cue, que anticipa información relevante, y mejoras en multitarea con arrastrar y soltar.
Las pantallas también impresionan: un panel interno de 8 pulgadas con hasta 3.000 nits de brillo y una pantalla externa de 6,4 pulgadas para uso rápido. La batería de 5.015 mAh promete hasta 30 horas de autonomía, un salto clave en los plegables. A esto se suma el soporte de carga inalámbrica Qi2, carga rápida por cable de 25W y el nuevo ecosistema Pixelsnap con accesorios magnéticos.
En fotografía, mantiene el nivel premium: un sensor principal de 48 MP, un ultra gran angular de 10,5 MP con macro y un telefoto de 10,8 MP. Con el respaldo de la IA, la experiencia fotográfica sigue siendo uno de los puntos fuertes de los Pixel.
El Pixel 10 Pro Fold saldrá a la venta el 9 de octubre desde 1.799 dólares en la versión de 256 GB, con variantes de 512 GB y 1 TB. Los nuevos colores Moonstone y Jade le dan un aire fresco y atrevido. El mensaje es claro: los plegables ya no son frágiles prototipos, sino dispositivos listos para competir en la gama más alta.