Una semana, otro récord de DDR5. Apenas unos días después del récord de 13.153 MT/s de Saltycroissant, el overclocker AiMax ha superado esa marca con unos impresionantes 13.211 MT/s, con validación de CPU-Z. 
Este logro se alcanzó utilizando la placa base GIGABYTE Z890 AORUS Tachyon ICE, un módulo de memoria Patriot Viper Xtreme 5 de 24 GB y el procesador Intel Core Ultra 7 265K, todo enfriado con nitrógeno líquido.
A primera vista, el aumento de solo 58 MT/s respecto al récord anterior podría parecer algo marginal. Pero en la práctica, cada incremento en esta zona de frecuencias es una auténtica lucha contra la física. La estabilidad de la memoria y el controlador de memoria se vuelve muy sensible a frecuencias tan altas, y hasta el diseño de las trazas en la placa puede marcar la diferencia entre el éxito o un fallo. Por eso, la placa Z890 AORUS Tachyon ICE sigue apareciendo en los primeros puestos: su diseño optimizado, la potente entrega de energía y la configuración de 1DPC (un DIMM por canal) minimizan las interferencias y permiten estabilizar frecuencias tan altas.
En cuanto al récord, AiMax informó que alcanzó una frecuencia de memoria de 6605,7 MHz; al multiplicarlo por dos para DDR, obtenemos los impresionantes 13.211 MT/s. Los timings se mantuvieron estables con CL68-127-127-127-2, lo que permite una latencia razonable a pesar de las frecuencias tan elevadas. Es importante resaltar que se utilizó un módulo de memoria de 24 GB, lo que representa un punto óptimo en términos de densidad y estabilidad de señal, especialmente en una configuración de un solo módulo.
Por qué esto importa, y por qué no cambiará tus FPS
Seamos sinceros: el salto de 13.153 a 13.211 MT/s no cambiará tu experiencia en juegos, ni reducirá los tiempos de compilación, ni acelerará el uso de múltiples pestañas del navegador. Estos récords son más un deporte – una demostración de ingeniería y tenacidad humana – que una mejora real en el rendimiento diario. Sin embargo, son importantes porque amplían los límites. Lo que hoy se logra con nitrógeno líquido, en el futuro podría ser alcanzado con sistemas de refrigeración por agua, y dentro de algunas versiones de BIOS, este tipo de resultados podría ser accesible como perfiles XMP para el público general.
Vale la pena señalar que estos récords siempre se logran con un solo módulo de memoria. Esto se debe a que, al alcanzar frecuencias superiores a los 12.000 MT/s, aún no se pueden obtener resultados estables con dos módulos. Solo cuando la topología del controlador de memoria y el diseño de los módulos se optimicen aún más, los récords con dos módulos serán posibles.
Lo que dice la comunidad
Cada nuevo récord provoca las mismas reacciones: disputas sobre marcas, bromas sobre los procesadores y reflexiones sobre si “hubiera sido mejor elegir Arrow Lake”. La realidad es que el secreto no está en la marca, sino en la pureza eléctrica del sistema: el diseño de la placa, la madurez del BIOS, la selección del DIMM y el controlador de memoria. En este caso, todo el sistema trabajó perfectamente en conjunto para lograr el récord, sin ser solo una cuestión de marketing.
Lo que sigue: 13.500 MT/s y los límites físicos
¿Es posible llegar a 13.500 MT/s? Definitivamente, sí. Con mejoras en el binning del controlador de memoria, nuevos algoritmos de entrenamiento y una arquitectura de módulos más eficiente, esa cifra es alcanzable. Sin embargo, cada avance hacia esa meta se vuelve más difícil, ya que los problemas de temperatura y los requisitos de voltaje se vuelven más complejos. Por eso, estos avances llegan en pequeños pasos, con aumentos de 20-70 MT/s en lugar de saltos de 500 MT/s.
Detalles técnicos de la configuración
- Placa base: Z890 AORUS Tachyon ICE (optimizada para overclocking extremo de memoria)
- Procesador: Intel Core Ultra 7 265K (el IMC es más importante que el número de núcleos)
- Memoria: Patriot Viper Xtreme 5, 24 GB (un módulo)
- Refrigeración: Nitrógeno líquido para CPU y memoria
- Timings: CL68-127-127-127-2, verificado por CPU-Z
En resumen, el nuevo récord de DDR5 se ha establecido en 13.211 MT/s. Esto no cambiará tu día a día, pero marca una nueva frontera y demuestra lo que podría deparar el futuro – y esos récords son los nuevos estándares para lo que está por venir.