Durante meses se especuló que Samsung abandonaría la versión Plus de sus buques insignia, apostando solo por los Galaxy S26 Ultra, Pro y Edge. Sin embargo, nuevos reportes desde Corea cambian el panorama: el Galaxy S26+ podría volver a escena, motivado no por innovación sino por las flojas ventas del Galaxy S25 Edge.
El Edge fue presentado como un modelo más delgado y elegante, pero ese enfoque no convenció al público. 
Apenas un mes después de su lanzamiento, la producción cayó en picada. Normalmente, los teléfonos alcanzan su mayor éxito en los primeros tres meses, pero aquí pasó lo contrario. En algunos países, las operadoras incluso lo ofrecen en rifas y promociones para liberar inventario.
Mientras tanto, el Galaxy S25+ vendió mejor que el Edge, a pesar de ser un modelo más antiguo. Para Samsung, la conclusión es clara: no se puede reemplazar un dispositivo popular por otro que el mercado rechaza. Según fuentes de la industria, la empresa ya retomó el desarrollo del S26+, intentando corregir el rumbo. Analistas destacan que en 2025 los usuarios priorizan autonomía, cámaras potentes y rendimiento antes que un cuerpo ultrafino que termina sacrificando lo esencial.
Los expertos comparan la situación con 2011, cuando el Galaxy S2 brilló gracias a su delgadez. Pero los tiempos cambiaron: hoy la gente quiere baterías más grandes y hardware sólido. Apple entendió bien la jugada con su estrategia Pro: precios altos, pero con especificaciones que justifican la compra. Algunos creen que Samsung debió presentar el Edge como una “Slim Edition” más barata, en lugar de intentar reemplazar la línea Plus.
El otro gran reto es el precio. La serie Plus rondaba los 999 dólares, mientras que el Edge salió a 1.199, paradójicamente con menos prestaciones. Se espera que el S26 Pro cueste 999 y el Ultra 1.399. Así que el S26+ tendrá que ubicarse con cuidado para no pisar a sus hermanos mayores ni confundir aún más a los clientes.
Lo único seguro es que el Plus sigue teniendo seguidores. Ahora falta ver si el Galaxy S26+ logra un regreso triunfal o si será otro paso en falso dentro de la estrategia de Samsung.