Durante meses, los rumores apuntaban a que Samsung lanzaría el Galaxy S26 Pro como sucesor directo del Galaxy S25. Las filtraciones eran tan insistentes que muchos ya lo daban por hecho. Sin embargo, una nueva ola de información parece desmentirlo todo: no habrá Galaxy S26 Pro. En su lugar, la compañía coreana presentará los modelos Galaxy S26, Galaxy S26+ y Galaxy S26 Ultra, siguiendo la misma fórmula de años anteriores.
Al principio se decía que el Galaxy S26 Edge reemplazaría al S26+, ya que supuestamente este último había sido cancelado.
Pero ahora las cosas se ven muy distintas: según fuentes cercanas, el Edge fue el modelo descartado, debido a las pobres ventas de su antecesor. Así que el S26+ sigue con vida y llegará junto al S26 y el S26 Ultra como parte de la próxima generación.
Esta contradicción ha generado bastante confusión entre los seguidores de la marca. ¿Son simples inventos de Internet o hay algo de cierto detrás? Algunos analistas creen que esta confusión proviene de la propia Samsung, que podría haber cambiado de rumbo varias veces durante el desarrollo de la serie S26. Si eso es cierto, pinta la imagen de una empresa que no termina de decidir qué dirección tomar con su gama más emblemática.
Los rumores más recientes indican que el Galaxy S26 incluirá el nuevo procesador Exynos 2600 en muchos mercados, al igual que el S26+. Las cámaras, en cambio, seguirían siendo las mismas que las del S25, por lo que las mejoras se concentrarían en la batería, que aumentaría a 4.300 mAh frente a los 4.000 mAh del modelo anterior. No es una revolución, pero podría traducirse en una mejor autonomía, algo que los usuarios llevan tiempo pidiendo.
Muchos opinan que Samsung por fin está entendiendo que cambiar el nombre y hacer pequeños ajustes ya no es suficiente para mantener el interés. Si se confirma la estrategia, el Galaxy S26 podría representar un intento de estabilizar la línea, priorizando eficiencia y fiabilidad. Pero también existe el riesgo de que pase desapercibido, como una simple actualización con pocos cambios reales.