Starbreeze anunció oficialmente la cancelación de Project Baxter, un juego cooperativo ambientado en el universo de Dungeons & Dragons que había sido presentado a finales de 2023. 
La compañía sueca explicó que concentrará todos sus recursos en reforzar la franquicia PAYDAY, su propiedad intelectual más reconocida y la que sostiene gran parte de su negocio.
En un comunicado, el CEO Adolf Kristjansson agradeció al equipo de desarrollo y a Wizards of the Coast por su apoyo. Señaló que, aunque Baxter no llegará a ver la luz, muchas de las ideas y aprendizajes obtenidos se aplicarán en futuros títulos de Starbreeze, incluyendo nuevas entregas de PAYDAY. Según Kristjansson, se trata de una decisión dura pero estratégica, pensada para garantizar la estabilidad y el crecimiento del estudio en los próximos años.
El impacto económico y humano ha sido fuerte: alrededor de 27 millones de dólares invertidos se dieron por perdidos, y aproximadamente 44 personas – entre empleados internos y colaboradores externos – fueron despedidas. El juego estaba planeado para 2026, pero en febrero de 2024 aún se encontraba en fase de preproducción, lo que ya levantaba dudas sobre su viabilidad. A esto se suma el tropiezo de PAYDAY 3, criticado por problemas técnicos y por decisiones impopulares de monetización, como la suscripción para PAYDAY 2 y el aumento repentino de precios en un paquete de DLC, que luego fue revertido.
Para los seguidores de Dungeons & Dragons, esta cancelación es otro golpe después de que, en 2023, también se suspendiera un ambicioso RPG de mundo abierto de Hidden Path. Sin embargo, la franquicia no está muerta: Demeo x DUNGEONS & DRAGONS: Battlemarked llegará en 2025, el estudio Invoke (responsable de Dark Alliance) prepara un nuevo título y Giant Skull trabaja en una propuesta de acción y aventura. Incluso el presidente de Wizards of the Coast manifestó su interés en un MMORPG de D&D, aunque reconoció que no es algo que vaya a suceder pronto.
Para Starbreeze, apostar todo a PAYDAY puede ser visto como un movimiento lógico pero arriesgado. La marca sigue siendo muy conocida, pero la confianza de la comunidad se ha erosionado y será difícil recuperarla. Si la estrategia funciona, la empresa podría renacer; si fracasa, el futuro del estudio quedará seriamente comprometido. Mientras tanto, Project Baxter pasará a la lista de juegos prometedores que nunca lograron salir adelante.