The Elder Scrolls Online acaba de marcar un antes y un después con el lanzamiento del evento Batalla por el Muro Retorcido, el primero de su tipo: un acontecimiento mundial y único que alterará para siempre el mundo de Tamriel. Por primera vez, la actualización se lanza simultáneamente en PC, Mac, Xbox y PlayStation, rompiendo la costumbre de estrenar primero en ordenador. 
Es una celebración de escala masiva que une a toda la comunidad del juego en una sola guerra.
En el centro del conflicto se encuentra el Muro Retorcido, una barrera mágica compuesta de almas, creada por el temible Culto del Gusano. Hasta ahora, esa muralla impedía explorar el Solsticio Occidental, pero el evento busca derribarla en una épica campaña de tres fases que requiere la cooperación de todos los jugadores. Cada etapa presenta nuevos desafíos, recompensas y cambios reales en el mundo del juego.
La primera fase está dedicada a la preparación y la defensa. Los jugadores deben unirse a la Hermandad de Stirk, una alianza excepcional entre las tres facciones principales junto a los Gremios de Magos y Guerreros. El objetivo es recolectar suministros, reforzar los campamentos de asedio y resistir las primeras ofensivas del Culto del Gusano. Los portales planares comienzan a abrirse por todo Tamriel, generando incursiones y enemigos más poderosos en mazmorras y zonas públicas. Todos pueden participar, aunque solo quienes posean el Pase de Contenido 2025 pueden acceder a las misiones especiales de Solsticio. El NPC Orinde Glenuvon ofrece tareas diarias para combatir en estas áreas infestadas y obtener recompensas exclusivas.
Con la defensa establecida, arranca la segunda fase: la contraofensiva. Aquí comienza el asalto al Muro Retorcido, mientras el Culto desata su poder para detener el avance. Las batallas se vuelven más intensas, y los campamentos son constantemente atacados. Los jugadores deberán mantener las defensas y enfrentarse a Ghishzor, un Daedra de enorme poder conocido como el Maldrit de Solsticio, que aparece como jefe mundial. Derrotarlo exige coordinación y valentía, pues una simple distracción puede llevar al desastre. Cada servidor progresa a su propio ritmo, creando una sensación de comunidad y competencia entre regiones.
Finalmente llega la tercera fase, el momento decisivo: el asalto a la Fortaleza Retorcida. Una vez debilitada la muralla, los jugadores podrán entrar en la fortaleza y destruir las fuerzas del Culto desde dentro. Esta fase dura exactamente una semana desde que el primer servidor logra completarla. Al finalizar, el evento se cerrará y el mundo quedará alterado de forma permanente. Como en el legendario evento de apertura de Ahn’Qiraj en World of Warcraft, cada servidor escribirá su propia historia. Actualmente, los servidores europeos de Xbox y PlayStation lideran la batalla, y el progreso puede seguirse en la web oficial de The Elder Scrolls Online.
Este evento representa un nuevo capítulo para ZeniMax Online. Tras un periodo difícil, con despidos y la cancelación del Proyecto Blackbird, el estudio ha renovado su visión bajo la dirección de Nick Giacomini. Su meta: mantener The Elder Scrolls Online vivo durante décadas. La Batalla por el Muro Retorcido es una prueba del poder de su comunidad y un recordatorio de que Tamriel sigue lleno de historias por contar.