Trump contra Musk: subsidios eliminados, Tesla en picada y drama en redes

Trump vs.

Musk: Lo que alguna vez fue una relación conveniente entre Elon Musk y Donald Trump, hoy es un espectáculo público de ataques, reproches y mucho drama político. El conflicto no solo ha generado titulares, sino también pérdidas millonarias para Tesla.

Trump dijo sentirse “muy decepcionado” con Musk, insinuando que el CEO de Tesla solo se molestó cuando se eliminaron los subsidios para autos eléctricos del nuevo paquete legislativo. “Sabía perfectamente cómo funcionaba la ley, no se quejó… hasta que tocamos sus beneficios”, declaró el expresidente. Además, rechazó la candidatura de Jared Isaacman -un aliado de Musk- para liderar la NASA.

Musk, fiel a su estilo, respondió desde su cuenta de X (antes Twitter), llamando al proyecto de ley “una montaña de grasa repugnante” y asegurando que sin su apoyo, Trump jamás habría ganado en 2016. Trump no se quedó callado y dijo que Musk sufre de “síndrome anti-Trump”.

Fuentes revelan que Musk intentó en privado conservar el crédito fiscal de $7,500 para vehículos eléctricos, esencial para su plan de lanzar un modelo más barato. No lo logró. A partir de ahí, comenzó su cruzada en redes sociales, lo que contribuyó a una caída de más del 8% en las acciones de Tesla. En lo que va del año, la pérdida ya ronda el 20%.

Por si fuera poco, el sistema de conducción autónoma de Tesla (FSD) volvió al centro de la polémica. Bloomberg publicó que un accidente fatal por deslumbramiento solar dejó en evidencia sus limitaciones. Musk defendió su tecnología diciendo que sus cámaras “cuentan fotones”, pero expertos desmintieron esa afirmación: los sensores CMOS que usa Tesla no pueden hacerlo.

Además, en una reciente visita a Emiratos Árabes, Musk habría quedado molesto porque Jensen Huang, CEO de NVIDIA, fue el protagonista del evento. Una herida más al ego del magnate.

El resultado: una guerra de titanes en la que se pelean por subsidios y visibilidad, mientras el ciudadano común queda mirando desde la tribuna. Como siempre, los ricos juegan, y nosotros pagamos.