Ubisoft ha revelado oficialmente el nombre de su nueva filial: Vantage Studios. Este nuevo estudio será el encargado de llevar adelante algunas de las franquicias más emblemáticas de la compañía, entre ellas Assassin’s Creed, Far Cry y Rainbow Six.
La noticia llega tras la inversión de 1.160 millones de euros por parte de Tencent, que obtuvo un 25% de participación minoritaria. Este movimiento no solo supone un cambio en la estructura financiera de Ubisoft, sino que también marca un rediseño profundo de su estrategia de marca y de cómo gestionará sus IP más importantes.
Ubisoft describe a Vantage Studios como una nueva “casa creativa” que ofrecerá más autonomía a los equipos de desarrollo, sin renunciar al soporte tecnológico y a la experiencia acumulada de la empresa madre. La meta principal es reforzar los proyectos narrativos, ampliar las experiencias multijugador y de servicio en vivo, y fortalecer el área de juegos móviles, un terreno donde Ubisoft busca crecer de manera más agresiva.
La dirección estará en manos de Charlie Guillemot, hijo del CEO Yves Guillemot, y de Christophe Derennes, que ejercerán como co-CEOs. Este detalle subraya la intención de la familia Guillemot de mantener un control firme sobre la compañía, incluso con el creciente peso de inversionistas externos como Tencent. Todo apunta a que, en el futuro, los jugadores podrían encontrarse con títulos de Assassin’s Creed firmados únicamente bajo el sello “Vantage Studios”, sin el logo de Ubisoft al frente. Una fórmula muy parecida a la de Activision, que delega el desarrollo de Call of Duty a estudios como Treyarch o Infinity Ward.
Desde su lanzamiento, Vantage Studios ya cuenta con un gran músculo creativo: equipos de Montreal, Quebec, Sherbrooke, Saguenay, Barcelona y Sofía – miles de desarrolladores que han dado vida a algunos de los mayores éxitos de Ubisoft – ahora trabajan bajo el mismo paraguas. La promesa es que estos equipos no solo continúen con las sagas, sino que también encuentren nuevas formas de conectar con los jugadores. Ubisoft asegura que los ciclos de retroalimentación serán más cortos y que los estudios tendrán mayor libertad para experimentar, aunque con el respaldo de sus recursos tecnológicos y organizativos.
Además, la compañía ha dejado claro que Vantage no será un caso aislado. Ubisoft planea crear más “casas creativas” dedicadas a distintas marcas. Aunque aún no hay confirmación, no sería extraño que Watch Dogs o The Division reciban estructuras similares en el futuro. De esta forma, la empresa se transformaría en una red de estudios semiautónomos, unidos por una identidad compartida pero con independencia suficiente para definir sus propios caminos.
El anuncio se produce tras un 2024 complicado para Ubisoft, con ventas decepcionantes y un mercado de videojuegos cada vez más exigente, marcado por costos de producción desbordados y una competencia feroz. Con la creación de Vantage Studios, la empresa busca recuperar agilidad y acercarse más a la comunidad gamer. Para los jugadores, esto podría significar un cambio cultural: juegos que ya no se identifiquen directamente con Ubisoft, sino con nuevas marcas internas como Vantage.
La gran incógnita es si este giro convencerá a los fans. La entrada de Tencent ha generado dudas sobre la dirección creativa y la independencia cultural de los proyectos. Ubisoft, sin embargo, lo presenta como un paso necesario para modernizarse y proteger su autonomía. El tiempo dirá si Vantage Studios será recordado como el inicio de una nueva etapa creativa o como un capítulo más en la turbulenta historia de la compañía francesa.